"Una quimera, un dios peruano, un Ganesh,
un dios Chino, un signo auspicioso,
un deseo por el bien del mundo.
El deseo monstruoso y sagrado
de la unidad..."
Lewis Thomas y la Microzoología.
Lewis Thomas
E.U.A. (1913-1996)
Médico, investigador, poeta, etimólogo.
En la Biblia los animales fueron creados por Dios al igual que el hombre. En la historia de la Tierra se trataban de organismos que evolucionaron en formas más complejas como parte de la adaptación a los constantes cambios. En ambas versiones se destaca la inevitable interrelación hombre-naturaleza. Relatos bíblicos como en el Génesis, que va desde la "Creación", hasta el "Arca de Noé"; así como el arte rupestre en las Cuevas de Lascaux en Francia, o los hallazgos de restos fósiles de hombres junto a animales en África, dan cuenta de ese vínculo indisoluble.
Parte de esta relación hombre-naturaleza, así como hombre-bestia, es de carácter "simbólico". Tanto en la Biblia como en la historia de la Tierra, la "naturaleza" y por tanto los animales (bestias), tienen una fuerte carga simbólica (que aún prevalece en nuestros días), como una forma de expresar la manera en que el hombre interacciona con la naturaleza, ya sea a través de su fascinación, por ejemplo por lo extraordinario; el temor, tal vez a lo que no puede controlar, a lo desconocido; y el respeto, quizá para lo que le representa como algo sagrado.
A partir del desarrollo de las culturas (las antiguas civilizaciones), vemos cómo ésta interacción hombre-naturaleza-bestia, se reconstruye en una forma más compleja en lo que representa su particular "cosmogonía", que conforma su propio "ser" (del hombre) y su propia "naturaleza". Su creencia; a veces adoptando formas "híbridas"; cómo no hacer referencia a esos seres mitad hombre, mitad bestia. Así pues, tenemos al antropófago de Cronos, que engulle a sus propios hijos, al dios egipcio con la cabeza de chachal, llamado Anubis, que acompaña al difunto desde su embalsamamiento, hasta su llegada al Valle de los Muertos; también tenemos personajes fantásticos como el "minotauro", mitad hombre - mitad toro. Todos ellos en su momento formaron parte del pensamiento y de la creencia de su existencia, para una civilización, para toda una cultura; ahora sólo se concibe como mitología... como resultado de la imaginación.
Mucho antes de que existiesen los Bestiarios Medievales, los griegos, los alejandrinos y los italo-romanos, se encargaron de realizar los primeros tratados, ensayos sobre la "Historia Natural" y que en la época Medieval servían como base para la realización de los Bestiarios. Obras como el "Physiologus" alejandrino (S.II a. C.), las "Etimologías" de San Isidro de Sevilla (S. VII), han sobrevivido a través del tiempo, sirviendo de inspiración para obras como "Naturalis Historia" de Plinio el Viejo, el "Il Millione" de Marco Polo, o el "Imago Mundi" de Pierre d'Ally.
Ya en la Edad Media, la explicación del "mundo" provenía de fuentes teológica - filosóficas, pues para el mundo medieval, la teología representa el "orden de la razón" en la Europa occidental, así como el Islam, para el mundo musulmán; se entendía el "mundo" y la "naturaleza" a partir de estas concepciones teocéntricas de la cultura cristiana y musulmana, en donde la indefinición entre el conocimiento (científico) y lo mágico; le confiere a la naturaleza una cualidad (y una entidad) mística.
Como ejemplo de ello tenemos los "Bestiarios Medievales", tratados de Historia Natural, principalmente "animal" (aunque también incluían algunas plantas y piedras); en donde además de ser un catálogo en donde se registraban todas aquellas bestias creadas por Dios (según el Génesis); la descripción física y de las cualidades y de los hábitos de cada animal, así como las ilustraciones artísticamente elaboradas, servían como base para la enseñanza de las doctrinas morales, convirtiéndose éste en el principal objetivo de los Bestiarios Medievales, sobre todo los posteriores al siglo XI.
Sin embargo, inmersa en una crisis por la densidad demográfica, así como por las hambrunas, las constantes guerras y el cambio del sistema feudal al capitalista, Europa empezó una "transición" cultural, científica y tecnológica; gracias a la introducción de ciencia y tecnología extranjera, además de las que los europeos occidentales desarrollaban a partir de ésta; sentando así el precedente para el inicio de la "era de los descubrimientos" o "era de las exploraciones". Momento que permitirá al hombre medieval, reconsiderar su "condición humana", su "ubicación" en el "mundo", tanto en el plano físico, como en el plano espiritual y su relación con la "naturaleza" y por lo tanto con los animales. No sin antes haberse replanteado una nueva concepción de "mundo" y de "naturaleza".
A la llega al "Nuevo Mundo", los exploradores estaban sorprendidos ante la gran variedad de flora y fauna que encontraban a su paso, cuenta de ello lo encontramos en las Cartas de Cristóbal Colón, como la que le escribió a Luis de Santángel, así como en la "Historia de las Indias" de Fray Bartolomé de las Casas, o el "Bestiario de Indias" de Gonzalo Fernández de Oviedo, por citar algunos. Pero la forma en que estos personajes describen la naturaleza se ve influenciada y/o alterada por las transformaciones que estaba viviendo la Europa occidental de la Edad Media: la transición a la "modernidad".
En la actualidad, en el nombre del desarrollo y a veces de la investigación, el hombre ha sido el destructor ya sea de manera directa o indirecta de muchas especies de flora y fauna, y otras tantas que están en vías de extinción y de las que sólo quedará testimonio de su paso por este mundo, a través de algunas fotografías. Sin embargo, y en contraste con lo anterior, los avances científicos y el desarrollo de nuevas tecnologías, nos han permitido tener acceso a un mundo no menos fantástico que los Bestiarios Medievales, como es la "microbiología", o la "microzoología", con sus propias "microbestias", como las denomina el médico e investigador estadounidense Lewis Thomas.
Todo lo anterior sirve de base para plantearse muchas preguntas a cerca de los "Bestiarios", desde sus orígenes, hasta sus alcances en la actualidad, pasando por la cambiante "cosmovisión" que el hombre va creando según su contexto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario